Los heridos, incluyendo mujeres y niños muchos de ellos en estado crítico, fueron trasladados por ambulancias a hospitales de la cercana ciudad de Peshawar, capital de la provincia de Pakhtunkhwa, dada la ausencia de buenos centros médicos en la zona.
Varios edificios, comercios y vehículos resultaron gravemente afectados por la explosión, mientras que las fuerzas de seguridad acordonaron la zona, de acuerdo con la versión de diversos medios paquistaníes.
Las fuerzas de seguridad paquistaníes lanzaron en verano de 2008 una gran operación contra la insurgencia talibán en la región pero hasta el día de hoy los sucesos violentos siguen registrándose con frecuencia.